“Yo contemplo el vasto mundo
Donde el sol brilla,
Donde las estrellas centellan,
Donde las piedras reposan,
Donde las plantas viven
Y viviendo crecen,
Donde los animales sintiendo viven,
Donde el hombre, dotado del alma,
Al espíritu morada da.
Yo contemplo el alma
Que en mí latiendo está.
El espíritu de Dios teje
En la luz del sol y en la del alma,
En el espacio estelar ahí afuera,
En las honduras de mi ser aquí dentro.
A ti, espíritu divino, yo os suplico
Que bendiciones y fuerzas
Para el aprender y para el trabajar
Crezcan dentro de mí.”
Rudolf Steiner
Donde el sol brilla,
Donde las estrellas centellan,
Donde las piedras reposan,
Donde las plantas viven
Y viviendo crecen,
Donde los animales sintiendo viven,
Donde el hombre, dotado del alma,
Al espíritu morada da.
Yo contemplo el alma
Que en mí latiendo está.
El espíritu de Dios teje
En la luz del sol y en la del alma,
En el espacio estelar ahí afuera,
En las honduras de mi ser aquí dentro.
A ti, espíritu divino, yo os suplico
Que bendiciones y fuerzas
Para el aprender y para el trabajar
Crezcan dentro de mí.”
Rudolf Steiner
Este poema es el indicado por Rudolf Steiner como verso de la mañana para recitar con los niños desde la 5º clase de educación primaria. Yo lo conozco en otra traducción:
ResponderEliminarYo miro hacia el mundo
en donde luce el Sol
en donde estrellas brillan
en donde piedras yacen.
las plantas vivas crecen
los animales sienten
y el hombre en su alma
da al espíritu morada.
yo miro hacia el alma
que vive en mi interior
espíritu de Dios
el teje en la luz
del alma y del Sol
en el espacio afuera
y dentro de mi ser.
a ti yo me dirijo
espíritu de Dios
pidiendo que en mi crezcan
la fuerza y bendición
al aprender en la labor.
gracias por la participación y el interés...
ResponderEliminarYo contemplo el vasto mundo
ResponderEliminardonde el sol brilla
donde las estrellas centellean
donde las piedras yacen
donde las plantas viviendo crecen
donde los animales sintiendo viven
donde el hombre, dotado de alma
da morada al espíritu.
Yo contemplo el alma que en mi interior vive.
El espíritu de Dios crece en la luz del sol
y en la del alma
En el espacio sideral ahí afuera,
En las honduras de mi ser aquí adentro.
A ti, oh espíritu de Dios
yo me dirijo suplicando
que bendiciones y fuerzas
para el aprender y el trabajar
crezcan dentro de mí.